Me pregunto qué estarás pensando ahora mismo…tras leer el título de este post. Si esta frase: tengo picores en el cuerpo, la pronunciara en una reunión con mis amigos, seguro que generaría más de una risita…jejeje. Y es que mis amigos son muy mal pensados y siempre le sacan punta a todo.

 ¿Por qué nos puede picar la piel? ¿Tiene algún sentido la famosa frase de comer y rascar todo es empezar?

La piel es el órgano más grande de nuestro cuerpo y es el reflejo de nuestra alma, de cómo nos sentimos. Y eso lo saben muy bien los expertos en psicodermatología que estudian la conexión entre el estrés psicológico y el estado de nuestra piel.

La relación entre la piel y el sistema nervioso comienza desde antes de nacer. Las células que forman la piel y el sistema nervioso tienen su origen en el mismo tejido embrionario, el ectodermo. Tanto la piel como las células del sistema nervioso se ven afectadas y relacionadas con los mismos interlocutores: el sistema endocrino, responsable de la liberación de las hormonas y el sistema inmunitario, relacionado con la defensa de nuestro organismo.

Sabemos que el estrés desencadena y empeora muchos de las afecciones cutáneas (psoriasis, dermatitis atópica, alergia…) pero ¿cuál es la relación entre el estrés y la piel?

El estrés psicológico es un estado de activación fisiológico excesivo del organismo causado por situaciones con una fuerte carga emocional. Cuando por alguna circunstancia, nuestro cerebro interpreta que hay una amenaza, ordena al sistema endocrino que libere hormonas del estrés que viajan por el torrente sanguíneo y llegan a la piel, una vez ahí son capaces de generar como resultado final, una liberación masiva de histamina que provoca una reacción alérgica que puede hacer que tengamos picores en el cuerpo, que la piel enrojezca, se escame o se formen ampollas.

Buscar el lado positivo de las cosas, hacer deporte, meditar y hacer yoga son algunas prácticas que nos pueden ayudan a afrontar el estrés y por tanto a mejorar las afecciones de la piel.

Buscar el lado positivo de las cosas

Te recomiendo este ejercicio que extraje del libro La vida que florece del psicólogo de la felicidad Martin Seligman, es muy sencillo y tiene un extraordinario poder. Consiste en apuntar al final del día, 3 cosas bonitas que te hayan pasado, no tienen por qué ser grandes eventos, puede ser algo como la sonrisa de tu hijo al llegar a casa o el placer del agua de la ducha al caer sobre tu piel.

Deporte

Practicar un deporte en grupo y al aire libre seguro tendrá un efecto súper beneficioso para reducir tu nivel de estrés. Ya sé que esta recomendación puede sonar a música celestial y que si eres de los que no lo practicas, tu excusa favorita será que no tienes tiempo…eso también me lo sé.

Meditar

Para empezar basta con que dediques unos 5 minutos. Pararte y disfrutar del momento presente puede cambiar mucho tu nivel de estrés. Te recomiendo este vídeo de meditación en un minuto. No tendrás excusa para decir que no tienes tiempo.

Otras formas de aliviar el picor en el cuerpo

Productos cosméticos

Desde el punto de vista dermatológico hay otras cosas que puedes hacer para mejorar el estado de tu piel y bajar la intensidad del prurito o picor, entre ellas podemos citar:

Realizar la higiene de la piel con agua no demasiado caliente y utilizar de geles de baño suaves con una composición rica en elementos reengrasantes y calmantes y tensioactivos (agentes lavantes) de bajo poder irritante como los que puedes encontrar en Glicolat gel de baño o Atopikos gel de baño..

Hidratar la piel con productos cosméticos que ayuden a nutrir y mejorar los estados descamativos de la piel. Nuestra recomendación Glicolat leche estados descamativos para pieles secas o Atopikos leche pieles sensibles y atópicas que contiene extractos de plantas de acción calmante (extracto de regaliz y de ruscus).

Aromaterapia

Se ha visto que el simple hecho de oler ciertos tipos de aromas tiene un efecto positivo sobre el estrés y por tanto, un efecto supresor de la respuesta cutánea.

Masajes

Los masajes relajantes son ideales para dar tregua al estrés. Son una buena forma de detener el tiempo para ti, descansar y olvidarte de todo por un instante. Lo ideal es acudir a un SPA, un centro estético o de masajes y dejarte llevar.

Y tú ¿qué haces cuando tienes picores en el cuerpo? ¿utilizas alguna técnica que puedas compartir con nosotros?